domingo, 18 de octubre de 2009

La Reina de la "LANCIA"


Cuenta la historia que una adolescente estaba cansada de sufrir, de vivir una vida que no se merecía... uno de otros tantos días de su corta vida, hasta el momento, decidió salir de ese pueblo que la vio crecer, alejarse de su familia, alejarse de cosas buenas, pero por sobre todo, alejarse de las cosas que la lastimaban y que le hacían pensar que no alcanzaría una vida hermosa como tantas veces, mientras tomaba un lápiz y lo deslizaba sobre un papel, soñaba.
Su mano dibujaba paisajes, sueños, esperanzas, lugares en los que ella se veía feliz. Por un momento su mente parecía volar, escapar de tanto dolor, de tanto sufrimiento. En su soledad, lejos de todo, rodeada de personas que no la conocían en profundidad, personas que aunque miraran sus ojos trasparentes y llenos de vida, no entenderían que en su corazón había un dolor muy grande y que sólo el amor sanaría.
El tiempo pasaba y aquella adolescente rebelde comenzaría a entender que el vivir estaba en cada día, que no estaba sola y que su corazón había sido creado para ser amado, para ser respetado, que así como nadie le preguntó si quería nacer, la vida no le preguntaría si quería ser feliz, ella tendría que buscar la respuesta y vivir, buscar la felicidad, transitar por los caminos sin preguntarse tanto, sólo disfrutando.
Un día como cualquier otro sus ojos cambiarían, su rostro mostraría algo más que una tristeza interna, sus ojos conocerían el amor, no todo sería como en un cuento de hadas, pero sin dudas, ya no estaría sola en este mundo que solía golpearla sin merecerlo. Aquella adolescente dejaría de ser una simple joven, se convertiría en una Reina, en una mujer.
La rubia mujer de ojos claros, de cabellera larga y hermosa, ya no agacharía más la cabeza ante el amanecer de cada día, miraría de frente y con los ojos llenos de vida, con los ojos puestos en ser feliz, en su felicidad... las caminatas en el bosque no se hacen presente en este cuento, no aparecerá un joven en un caballo blanco y la salvará de la bruja malvada... en este cuento la joven de mirada transparente, rescatará al príncipe para transformarlo en Rey, rescatará su propia vida y seguirá su camino como ella creyó que era lo mejor. Aunque temió equivocarse, su presente le demuestra que nada fue un desperdicio, que su vida estuvo llena de momentos inolvidables y lo seguirá estando. Aquellos momentos de tristeza permanecerían en su corazón y otros vendrían, pero se daría cuenta que la vida la pondría en situaciones en las que alguna vez estuvieron esas tantas personas que la habían lastimado, sería su oportunidad para cambiar su accionar. Al no hacer lo que a ella le habían hecho, hizo de si una persona hermosa, con un corazón inmenso, una persona que siempre será amada y respetada... como ella siempre quiso y soñó mientras deslizaba un lápiz o un pincel sobre un paño o un papel.
La Reina optó por dejar atrás sus intereses, de un momento a otro sus ojos pasarían a ver para otra persona, su felicidad dependería de la felicidad de otro, o mejor dicho de otros dos, llegarían a su vida dos almitas, dos personas que la harían transitar por un mundo totalmente distinto, en un rol que nadie le había enseñado, un rol que no entendía pero que, con naturalidad, salía de su ser para que hoy, esos dos ángeles, la amen como la aman.
Alguna vez una de esas almitas la miró a los ojos y la lastimó, alguna vez alguna de esas dos almitas la decepcionaron, pero la reina de la “Lancia” jamás bajó la mira y jamás dio la espalda, no se cansó de poner el corazón, el hombro, el oído a ese ángel que parecía escapar y transitar por lo que ella también transitó cuando joven,el dolor.
Su vida es un aprendizaje para ser trasmitido, hoy mira con sus ojos llenos de amor, hoy su vida es la impensada, aquella que jamás habría soñado, aquella en la que encontró muchas respuestas.
A ella nadie le preguntó si quería nacer, y ella siguió el ciclo, no le preguntó a su príncipe y a su princesa si querían nacer, sólo los trajo al mundo para saber que nunca volvería a estar sola.
Su princesa no muchas veces reaccionó como ella hubiera querido, la lastimó y la dejó herida en medio de una realidad que le dolía. Su princesa rebelde, caminaba enceguecida, la reina no se alejaba, siempre cerca aunque rechazada.
Un día la princesa se dio cuenta que las cosas las estaba haciendo mal, que el camino que había elegido la estaba golpeando, se cayó, se lastimó mucho con una piedra que quedará por siempre en su recuerdo, pero lo hermoso de esto es que la princesa no tuvo que salir en busca de ayuda, ella sólo se levantó y abrazo a la persona que nunca se había separado de su lado, a la persona que ella había ignorado todo el camino.
La princesa abrazó muy fuerte a la Reina, lloró, pataleó y le pidió que la abrazara y cuidara como cuando era una bebé, después de recriminarle por qué la había traído al mundo para sufrir, se dio cuenta que la Reina la había traído al mundo para ser amada, respetada. La Reina, una vez más, reaccionó como le hubiera gustado que reaccionen con ella cuando era una joven, el abrazo que no estuvo como ella hubiera querido, pero sí estuvo para esa princesa que le había sacado muchas horas de sueño, que le había proclamado celos estúpidos, que la había lastimado sin compasión.
La Reina de la "Lancia", aquella que transitó por una niñez que no merecía, aquella que luchó en su adolescencia sola, dando fuerzas a sus alas para nunca caer; calmó su vuelo para seguir adelante, le enseñó a volar a su príncipe y a su princesita, les enseñó a vivir. Hoy los acompaña en cada viaje que ellos realizan solos.
La Reina, una madre que dio y da todo por sus hijos, una madre que no espera, sólo entrega, una madre que mira con orgullo cada accionar y que sabe que nunca la van a traicionar y si sus hijos lo hacen, sabe que volverán para retractarse, porque sabe.... que su amor nunca se equivoca, porque el amor que brindó supera todo.

“La vida no es el número de momentos en que respiras, sino el número de momentos que te quitan la respiración”, La Reina de la “Lancia” buscó un reino para ser feliz, lo formó y lo forjó de manera tal que nadie lo pueda destruir.

Los cuentos de hadas existen, siempre y cuando haya amor en sus protagonistas, haya esperanza, haya ganas de vivir.

Su Rey era un señor como cualquier otro, pero a su lado se convertiría en el ser más envidiado, la belleza de la Reina despertaría almas llenas de bronca, una bronca que ella derrotaría con una simple mirada, con una simple palabra, un simple sentimiento: El amor.

Su princesa sabe como transitar este mundo, su princesa se cae pero al levantarse siempre la mira y se ríe, la Reina mira y dice: “Yo te dije”, pero que sin embargo no la reta, la acompaña y con un abrazo y un beso le da el empujón que la princesa necesita para seguir adelante.

Susana Beatriz Dominguez de Di Paola, aquella que cambió su mundo, aquella que demuestra que cada uno es artífice de su propio destino. Aunque le costó levantarse más de una vez, nunca dudó en hacerlo, aunque lloró, nunca se detuvo. Desde sus 26 su vida pasó a segundo plano, su vida pasaría a ser otra, a los 30 su vida sería dedicada totalmente a dos personitas. Hace 27 años que su vida es otra, pero hace 27 años que en sus ojos y su corazón el amor es cada vez más fuerte.

El amor hacia una persona la llevaría a conocer un mundo totalmente distinto al que ella soñaba en sus momentos de vuelo, el amor a su Rey, aquel que la convertiría en la Reina de la “Lancia”, hoy se multiplica por tres, ese amor la transformaría en la madre más maravillosa a los ojos del príncipe y la princesa rebelde.

Ojos transparentes que jamás se oscurecieron, lloraron y se cerraron pero hoy más abiertos que nunca guían la vida de dos almas que la aman.

"Susana, tu inicial siempre estará en mi piel porque te amo como nunca podré amar a nadie, porque el amor que siento por vos es muy difícil de expresar y porque mi vida no va a alcanzar para poder retribuirte todo lo que vos hiciste y haces por mi, te amo mamá y gracias por poner en mi boca esta palabra tan maravillosa: MAMÁ", dijo la princesa.

La Reina que aceptó la Lancia, la reina que no pensó en lo que podría pasar, la Reina que vivió y vive y que toma la vida entre sus manos día a día para hacer de ella un mundo soñado para sus hijos, para hacer de ella el cuento de hadas mas hermoso contado.

Un cuento sin final pero sin dudas, un cuento que la escritora disfrutó narrar.

viernes, 9 de octubre de 2009

El comienzo de un cambio que aun tiene consecuencias.

La revelación a un sometimiento hoy inconsciente.
Mientras un territorio se jactaba de independiente, otro comenzaba a transitar un nuevo camino, una nueva forma de vivir. El Virreinato del Río de Plata, una forma de gobierno que venía a cambiar la vida de los nativos, y al llegar sin permiso y sin comprensión, traería con ella un cambio que tardaría en desarrollarse muchos años.
Una América del Sur colonia de España, un país que desde hacia muchos años venía creciendo como Nación, con habitantes que comenzaban a encontrar en sus pensamientos la búsqueda de una nueva forma de vivir, cansados de esperar que la muerte traiga la felicidad por una Iglesia que custodiaba todo. Artos del abuso de poder, los habitantes comenzaban a entender que las cosas no debían ser como los otros querían, sino que ellos debían decir cómo tenían que hacer las cosas los de arriba.
La Iglesia también participó de estas conquistas, junto con los colonizadores llegaban ellos a imponer una religión, de una manera que aún hoy no se comprende, pero que en aquel entonces los nativos de esta tierra debían aceptar.
El tiempo comenzaría a traer nuevos vientos. A tanto maltrato y sometimiento, pronto el hombre debería reaccionar, pronto se darían cuenta que no podían seguir siendo buenos anfitriones de aquel turista que había llegado a destrozar todo lo que a ellos les causaba felicidad, aquel territorio libre era mucho mejor que el que en ese momento pisaban.
Del otro lado, en los países europeos, ideas se habían gestado, ideas que habían sido concretadas y comprobadas, las que no tardarían en llegar a los oídos de los intelectuales que pretendían cambiar el suelo rioplatense.
Ideas relacionadas con la soberanía, la igualdad. Ideas de Protestantismo que vendrían a detener el poder de la Iglesia que tanto daño había causado.
Aunque el tiempo nos demuestra que aun seguimos bajo el pie de algunas naciones y que la libertad no fue conseguida desde aquel momento en que fuimos descubiertos por quienes creyeron que descubrir significaba invadir, cambiar, mentir, robar, destruir. A pesar de todo eso, el futuro argentino comenzaba a revelarse y comenzaba a sentir que desde aquel 1776, en ellos estuvo creciendo la necesidad de cambiar.
Un primer paso, el 25 de mayo de 1810, que se convertiría en batallas y lucha, pero que llevaría a los futuros argentinos a conseguir algo que fue lo más perecido a una independencia, el 9 de Julio de 1816.

Lo recuerdo porque todavía siguen enseñando que el 12 de octubre es un día para festejar y porque aquellos que comenzaron a crear un Estado argentino, mataban a los aborígenes para extender territorio e ideaban leyes que beneficiaran la llegada de extranjeros para transformarlos en argentinos!

miércoles, 7 de octubre de 2009

Basta de rostros, un objeto para el billete de $4.


Sin duda que este objeto más que figurar en los billetes se merece un monumento mucho más grande que el obelisco, ha soportado tantas cosas y aceptado tantas otras que no puede tomárselo como un simple sillón. Sobre él muchos se han sentado, muchos que elegimos nosotros y otros que sólo querían reposar en él mientras pisoteaban nuestra dignidad. El Sillón de Rivadavia merece un reconocimiento por parte de los argentinos.

Muchos que allí se sentaron no han sabido diferenciar a lo largo de su vida entre un sillón y un inodoro. Recuerdo (muy íntima la anécdota), cuando mi abuelo iba al baño le decía a mi abuela: “Gordi ya vengo, voy al trono”, quizás eso también se lo hayan enseñado a algunas de las personas que se sentaron en el Sillón de Rivadavia y nunca les explicaron que era una metáfora. Quizás eso explica el porque de todas las cagadas que se mandaron, sin darse cuenta, o mejor dicho, haciendo que no se daban cuenta, que el sillón representa al pueblo, al que los elige, al que le da las comodidades suficientes como para poder tomar buenas decisiones, en pocas palabras, lo que hacen es cagar al pueblo.

El Sillón de Rivadavia... que paciencia, también debería figurar en el libro Guiness, en el 2001 presenciamos cómo muchos funcionarios querían jugar al juego de la silla, y en una semana tuvimos 5 presidentes que quisieron sentir qué tan cómodo era.

Calculo que debe ser cómodo, porque muchos han cambiado constituciones para poder permacer ahí un tiempito más, sin saber que mientras se está sentado, también se puede hacer muchas otras cosas buenas.

Si nos ponemos en el lugar del Sillón de Rivadavia, nos daríamos cuenta que él soporta igual que nosotros, a nosotros nos cagan en nuestra propia cara, ¿ustedes piensan que nuestro querido sillón creado para ser respetado, viejo y cansado no ha recibido y aguantado más de un olor?.

Calculo que mucho soporta y todavía sigue en pie, él es parte de aquellos que dicen: “¡yo no l@ voté!”, más de uno proclama esa frase cuando la persona que está sentadita en el poder no hace las cosas que o cómo hubiéramos querido. Es uno más de nosotros, viejito es maltratado como tantos otros mayores que hoy viven al día después de haber trabajado tantos años para ganar una digna jubilación.

No olvidemos que este es el país del “yo no fui”, “yo no me acuerdo”, “¿yo dije eso?”.

Querido sillón, sin duda que nos representás a cada uno de nosotros, sin duda que haz sido maltratado por nosotros por permitir que algunos con o sin permiso nuestro se sienten de la manera que se sentaron en tí, pero bueno, lo mismo estamos haciendo con la juventud que viene, el maltrato no es sólo a vos, es hacia todos los argentinos.

Quizás mirándote día a día en un billete podamos comprender lo importante que sos y lo importante que es respetar a los demás. Creo que deberías figurar en el billete de $4, no porque ese fuese tu valor, sino porque sería la única manera en que los argentinos podamos apreciar más seguido tu imagen. ¿Quizás por eso San Martín valga $5?,

A Roca lo vemos muy poco, pero los que están sentados en el sillón lo ven muy seguido, de ahí el mal ejemplo, me parece que no ven al que corresponde, aunque también ven más verde que violeta.

¡Ay querido sillón!, perdón por tanto dolor, perdón por tanto maltrato. Argentina, perdón por no saber cuidarte.

Nueva imagen para el nuevo billete argentino.


Una mujer en el próximo billete a crear

Mercedes Sosa, aquella que canta al pueblo, aquella que se denomina “cantora que pretende reflejar en su canto a su país, su gente, sus hermanos”. Nunca dejó de agradecerle a la vida y nunca calló cuando se lo impusieron.

Su silencio en nuestro país duró muchos años, los militares y su arte no podían convivir en el mismo territorio. Debió exiliarse, y seguir mostrando su arte por el mundo, aquel que la tomó como la voz argentina más importante de América, aquel mundo que la respeta, la homenajea y hoy reza por su bienestar.

Su vida depende de un milagro, aquella que nos introdujo en su arte en 1983, de la misma manera que la democracia volvía a nuestro país, hoy es reconocida como una de las voces más importantes de la Argentina. Hoy es la cantante argentina más nominada para la décima entrega a los Grammy Latinos, por su disco “Cantora 1”, un volumen de duetos en el que interpretó clásicos folclores junto a otras figuras.

Su imagen merece un recuerdo eterno, su imagen merece ser respetada y recordada por cada ciudadano de este país.

Las imágenes de los billetes poco observados y de poca importancia, con el cambio de ideología a la imagen merecedora de un billete podríamos comprender que los que allí figuran, lo están porque sin duda hacen e hicieron historia. Sin duda que algunos no son merecedores de figurar en esa creación humana que muchas guerras causó y muchos distanciamientos provoca. Cómo entender por qué los mejores próceres argentinos figuran en los billetes de menor valor, y los que más lastimaron nuestra tierra y cultura, figuren en los billetes de mayor valor.

Muchos son merecedores de ser historia, “El artista es un hombre que vive para poder expresar lo que al otro le cuesta”, Mercedes Sosa lo logró, pudo poner nuestro sentir en muchas de sus interpretaciones y canciones, por sobre todo nunca dejó de llamarse argentina, nunca dejó agradecerle a la vida e introducir el folclore en cada generación.

Nació un 9 de julio al igual que nuestra independencia, nació en Tucumán, al igual que nuestra nueva vida como Nación. Considerada la folclorista más importante de nuestro país, también dejó su huella en los otros géneros que la música argentina ofrece.

Amada por sus colegas acompañada y respetada por ellos y el público, "La voz de Latinoamérica”, hoy lucha por su vida y si ese milagro no llega y si ella parte para cantar junto a los grandes que ya no están, me parece que será merecedora de dejar su imagen en nuestro día a día.

Sería la representante de aquellos que no callan, de aquellos que buscan un cambio en la sociedad, de aquellos que aunque ya no están desde algún lado custodian la llegada de alguna paz que pronto puede llegar si se persevera.

Representante del arte argentino y de la lucha por encontrar su lugar y saber vivir, “Gracias a la vida que me ha dado tanto”… sin duda nunca dejará de repetir.

Mercedes Sosa merecedora de figurar en un billete, ¡basta de imágenes vanas que lo único que hicieron fue pisotear nuestra dignidad!

Un San Martín no puede valer $5, debe valer mucho más.

Nota: fue escrito antes de su muerte (viernes 2/10/2009), agrego al trabajo después de su partida: Sentir que físicamente no nos volverá a regalar su voz en vivo y en directo, me deja una sensación de vacío. Sus valores eran muchos, una militante de la vida que nunca calló y nunca callará.